Lune d'acqua está inspirado en las lunas que orbitan alrededor de Júpiter y Saturno La sugestión de estos mundos lejanos se combina con la imagen familiar de una canica, elemento de la infancia que contiene sueños y recuerdos y que, con su colorida geometría interna, evoca esta sensación de fluidez y movimiento cristalizado.
La esfera, con su encanto misterioso, constituye el centro del proyecto.
La sujetan dos anillos, que la dejan libre de girar suspendida en el centro del cruce entre ambos.
Son el elemento estructural necesario que participa en su diálogo con el espacio. Sostienen el núcleo central mediante un eje inclinado para subrayar su carácter dinámico y lo reflejan en sus superficies brillantes espejadas.
Es una estructura reducida que se desarrolla prestando atención a la relación entre la luz central y las sombras que proyecta en el entorno.
El interior, sugerente y poético, interpreta el principio óptico patentado de Discovery.
El anillo que cierra la esfera contiene los ledes que inyectan luz en la superficie interior. Cuando está apagada, es transparente, mientras que cobra vida con la luz emitida por las microincisiones cuando se enciende, para revelar así la onda suave y tridimensional de su geometría.
Es fruto de una puesta en común de conocimientos y valores, del encuentro entre competencias y puntos de vista diferentes, aportados por Artemide y los autores del proyecto. Genera una luz que, además de iluminar los espacios, desea evocar significados y metáforas para transmitir un mensaje e invita a comprender nuevas perspectivas.
"El proyecto propone una nueva sugestión: la magia de las lunas de agua que orbitan en torno a Júpiter y Saturno. Estos cuerpos celestes fascinantes son mundos líquidos y misteriosos cubiertos de una capa esférica de hielo, cuyas características únicas los convierten en lugares privilegiados para albergar formas de vida dentro del sistema solar.
La actividad hidrotérmica que agita estos océanos ocultos se manifiesta en enormes géiseres que emergen de las grietas abiertas en el hielo, y la energía alimenta este maravilloso juego de equilibrio entre estados (vapor, líquido y sólido). El agua se deja llevar por la potencia de estas transformaciones y nos sorprende convirtiéndose constantemente en algo nuevo. Incluso luz.
Hay mucho por descubrir en estas lunas misteriosas. Calor, movimiento, núcleos metálicos. También la gravedad, el mejor diseñador que existe, se desvela en la perfección esférica y simétrica de estos objetos celestes que se deslizan en órbitas eternas.
Dentro de la esfera, la luz se vuelve líquida, se descompone en una envoltura de gotas, un prodigio posible gracias a un tejido luminoso que cobra vida, se flexiona y se ondula, evocando una sugestión que nos transciende: la de la gravedad como huella que dejan las lunas de agua en el tejido blando del espacio-tiempo. Una geometría animada.
Lune d’Acqua es una síntesis potente de diseño e innovación tecnológica que articula ciencia y misterio para convertirse en belleza."